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“Cambiar usualmente no es una cuestión de capacidad, sino casi siempre una cuestión de motivación”, Tony Robbins
Una cosa es QUERER EL CAMBIO y otra es COMPROMETERSE CON EL CAMBIO.
Si le pregunta a tus equipos QUIÉN QUIERE UN CAMBIO, seguramente todos levantarán la mano.
Si les vuelves a preguntar pero esta vez ¿QUIÉN QUIERE CAMBIAR? (quien quiere cambiarse o cambiar lo que hace), quedarán muy pocos en compromiso de acción levantando la mano.
Y por último, si preguntas ¿QUIÉN QUIERE LIDERAR EL CAMBIO en su empresa? Con todoa la responsabilidad y compromiso que esto implica, entonces no solo no levantarán la mano sino que no estarán presente delante tuyo.
Liderar el cambio propio es desafiante, aún más lidera el cambio en otros.